El arbitraje de criptodivisas (Bitcoin, Etherium, Litecoin, Tron) es un tipo de comercio que consiste en comprar criptodivisas para venderlas a mejor precio. El mercado moderno de criptodivisas está formado por más de 300 intercambios, en los que los tipos de cambio varían significativamente, a veces en cientos de dólares. Por lo tanto, la reventa puede ser bastante lucrativa.
El arbitraje de criptomonedas se divide en:
Además, el arbitraje se subdivide en arbitraje espacial (igual que el arbitraje de intercambio) y arbitraje temporal, en el que el poseedor de la criptomoneda espera la tasa más rentable.
La esencia del arbitraje es muy sencilla: hay que comprar la criptomoneda lo más barata posible y venderla lo más cara posible para beneficiarse de la diferencia de precios. Los beneficios son más tangibles si se realizan múltiples operaciones de compra/venta o se dispone de importantes recursos. También hay que tener en cuenta las comisiones de los intercambios y otras tasas obligatorias para obtener beneficios en las transacciones.
En el arbitraje entre intercambios, la criptomoneda se compra en un intercambio, donde es relativamente barata, y luego se transfiere a un intercambio con una tasa mejor, donde se vende. El beneficio se retira a la cuenta corriente del comerciante o se utiliza para comprar un nuevo lote de criptodivisas. A veces, los operadores no transfieren los activos entre las bolsas, sino que se limitan a vender la divisa en una bolsa alta y a comprarla en una bolsa más baja por la misma cantidad.
En el arbitraje intrabursátil, el operador se limita a una sola bolsa, lo que le permite ahorrar tiempo, esfuerzo y dinero. En un intercambio, el usuario compra una criptodivisa cuya tasa es más rentable para él y luego la cambia por otra y la vende con el beneficio obtenido por la diferencia de tasas.
El arbitraje de criptomonedas, independientemente del tipo, será rentable si el comerciante tiene grandes activos a su disposición, los ciclos de compra y venta se repiten muchas veces utilizando la automatización de ciertos procesos. También es importante elegir el momento exacto en el que la diferencia de precios es más rentable para el operador con el fin de maximizar la rentabilidad.
La ventaja indiscutible del arbitraje de criptomonedas es la oportunidad de obtener beneficios incluso con un capital inicial relativamente pequeño. También es atractivo porque puede hacerlo desde la comodidad de su casa, y también es atractivo por su riesgo relativamente bajo.
Pero también hay inconvenientes. En particular, una transacción puede «estropearse» si una bolsa no es lo suficientemente rápida para completar las transacciones. También existe la amenaza de hackear la bolsa o la cuenta personal del usuario. Además, el operador debe tener en cuenta todos los aspectos específicos de la bolsa: comisiones explícitas y ocultas, restricciones en los importes de las transacciones, etc. Además, el éxito es imposible sin convertir el arbitraje en una forma de vida, porque esta actividad, de hecho, tiene que ser vivida, estar constantemente en proceso, para tener éxito. Y esto no es posible para todos.
En el caso de la negociación entre bolsas, un factor de riesgo adicional es la necesidad de esperar el tiempo necesario para mover las divisas entre las bolsas: de una a dos horas, durante las cuales la relación de tipos puede cambiar a peor para el operador.
Los operadores avanzados y experimentados optimizan su trabajo utilizando programas especiales: Gekko, Haashbot, BTC Robot, GoArbitrage, Bibitbot, Cryptotrader.
También hay operadores que prefieren el arbitraje exclusivamente manual y utilizan recursos en línea que acumulan información sobre perfiles: BitinfoCharts, Data.bitcoinity, CoinMarketCap. También hay aplicaciones móviles con la misma funcionalidad: TabTrader (Android e iOS); zTrader (sólo Android).